Uno sí y otro no, uno sí y otro no, uno sí y otro no… y vamos avanzando en un juego perverso, a la patita coja, sin querer asentar los dos pies en el suelo. Y de esta forma eliminamos a algunos. No están todos. Y si sólo están algunos, el pensamiento único impera, sea el de una parte, el de otra o el de una tercera. Y tienen que estar todos porque la aportación que toda cultura necesita no puede ser sectaria y ni siquiera de parte; no puede ser parcial ni absolutizada. Todos son piezas del mosaico democrático. En el campo cultural es fundamental; en el histórico ni que decir tiene. Si no están todos el producto queda mutilado y no sólo es sectario sino que está sesgado. Y, evidentemente, induce al engaño. No hay mayor mentira que una verdad a medias.
Archivo de febrero 2010
En estos tiempos tan críticos que, con enorme sufrimiento, estamos viviendo, conviene una profunda reflexión, seria y activa. No vale ponerle siempre una vela a Dios y otra al diablo. Y ya que tanto se apela a la tradición, conviene no quedarse en lo anecdótico y poco comprometido e ir a la tradición más profunda y genuina. El otro día, escarbando en textos fundamentales de los Padres de la Iglesia, los que marcaron –con sus luces y sus sombras- el pensamiento cristiano, a partir de las Escrituras, y la reflexión doctrinal y teológica, me he encontrado con este texto de uno de los Padres más importantes de la Iglesia de Oriente, Juan Crisóstomo. El ilustre patriarca de Constantinopla, en el siglo IV, que ha pasado a la historia con el sobrenombre de Crisótomo, es decir, boca de oro, por su lucidez y su eficacia oratoria, nos ha dejado centenares de homilías. En una de ella, en la que comenta –como en la mayoría de las demás- un texto de la escrituras, hace esta contundente reflexión. Conviene a este tiempo, y en aquellos que sitúan su vida y su acción en parámetros cristianos, volver a hacerla, aunque hayan pasado nada menos que 16 siglos desde que se pronunció. Traslado aquí el texto tal y como se conserva. Este obispo antioqueno de origen, y que ejerce su labor pastoral en la capital constantinopolitana, también se planteaba preguntas fundamentales. Como en esta página tiene cabida todo lo que pueda interesar a nuestra cultura y a la praxis actual, origen de la misma, trascribo el texto:
«¿Qué le aprovecha al Señor que su mesa(=el altar) esté llena toda de vasos de oro, si Él se consume de hambre? Saciad primero su hambre y luego, de lo que os sobre, adornad también su mesa. ¿Haces un vaso de oro y no le das un vaso de agua fría? Y, ¿qué provecho hay en que le recubráis su altar de paños recamados de oro, si a Él no le procuráis ni el necesario abrigo? ¿Y qué ganancia hay en esto? Dime, en efecto: si viendo a un desgraciado falto del necesario sustento, le dejaras a Él que consumiera su hambre y tú te dedicaras a recubrir de oro su mesa, ¿es que te agradecería el beneficio o se irritaría más bien contra ti? Pues, ¿que si viéndole vestido de harapos y aterido de frío, no le alargaras un vestido, y te entretuvieras, en cambio, en levantar unas columnas de oro, diciéndole que todo aquello se hacía en honor suyo? ¿No diría que le estabas tomando el pelo y lo tendría todo por supremo insulto? Pues piensa todo esto sobre Cristo. Él anda errante y peregrino, necesitado de techo…Al hablar así, repito, no es que prohíba que también en el ornato de la iglesia se ponga empeño; a lo que exhorto es a que juntamente con eso, o, más bien, antes que eso, se procure el socorro de los pobres. De no haber hecho lo primero, a nadie se le culpó jamás; por lo otro, empero, se nos amenaza con el infierno… Mientras adornas, pues, la casa, no abandones a tu hermano en la tribulación, pues él es templo más precioso que el otro».
Huelgan los comentarios y vale la reflexión. Y cada palo, elegido libre y conscientemente, debe aguantar la vela que ha decidido enarbolar, y que merece todo el respeto, y exige la más profunda coherencia.
LO QUE SE HACE EN PROSA PUEDE ESCRIBIRSE EN VERSO
Published 12 febrero 2010 Uncategorized Leave a CommentTambién podemos escribir en verso y describir el paisaje social que nos rodea, la paradoja que rompe hasta los sabios dichos populares. Este poema lo escribí en el 2000:
EN ESTE PAÍS DE CIEGOS,
el tuerto no reinaba;
se encontraba en la cárcel,
me dijiste con sorna
y tenías razón.
El tuerto podía ver
y tuvo la osadía
de dejar el paisaje al descubierto.
Acabó, sin remedio, entre las rejas.
Estaba prohibida la verdad,
que era costosa, audaz, incitadora,
comprometida y casta;
molestaba el transcurrir monótono,
suscitaba preguntas
y desnudaba prendas ya gastadas.
Devolvía el relieve al horizonte
y descubría caminos prohibidos.
Los ciegos se empeñaban
en mantener la noche a toda costa.
El tuerto se encontraba encarcelado
pero su celda aún tenía ventanas.
Y en esa confusión deliberadamente impuesta tenía sus embajadores que más bien ejercía de encantadores que llenaban los foros de humo. También el poema es delo 2000.
CHARLATANES, PARLANCHINES Y GÁRRULOS
Aquel jadeante paridor de nadas
sin tiempo apenas para ver la luna,
que decía ser narrador de historias
e incluso paseaba en pesadillas.
Aquella atolondrada discusión continua
con tal de hacer creer que algo crecía
se movía, era, estaba
y ocupaba el espacio,
horror vacum que convertía en monólogo
cualquier posible intento de diálogo.
Gira y gira la rueda del tiovivo,
para siempre volver al mismo sitio
y simular la vida con tanto movimiento,
y llegar, sin remedio, a ningún sitio.
El miedo a detenerse
hacía que crecieran las palabras,
brotaran a borbotones sin comas,
sin puntos, sin guiones,
sin espacios en blanco y sin treguas.
El vacío ruidoso se extendía,
larga cuerda vocal ensalivada,
y ocupaba el espacio rectilíneo
que giraba y giraba esperando el ocaso.
Y así nos lucía el pelo en los cada vez más abundantes mentideros de la ciudad
El jueves, el actor y escritor Paco Algora estuvo en Jerez y nos deleitó presentando en la jerezana librería Hojas de Bohemia su nuevo libro Romance de locos coplas de ciegos, un libro de poemas cargado de autenticidad que presentó con acierto y lucidez expresiva el también escritor y periodista Juan José Tellez. Un regalo para todos. Pero el mayor regalo fue compartir horas, comida y paseo con Paco. Y recorrer las calles del viejo Jerez hablando de literatura, de teatro, de cultura y de libertad de pensamiento, que tampoco de moda están. Y volver a practicar el valor de la palabra. Momentos inolvidables e impagables que me enriquecieron de su pensamiento de su coherencia y de su honrada actitud ante la vida. Sus romances, recitados por él mismo con su profesionalidad y capacidad expresiva, llenaron el espacio de la Librería y nos deleitaron a todos. Porque deleita el arte, la estética y la literatura que se encuentra cargada de razones. “Los aires envenenasteis / con insaciable codicia / triunfar a costa de otros / no deja de ser malicia / la que os trae y la que os lleva / por vericuetos sombríos / en los que no brilla la luz / pese a estar muy concurridos / competidores feroces / arribistas pertinaces / tercos como acémilas. / en conseguir vuestros planes / a costa de lo que sea / justificáis los medios / por supuesto siempre a cambio / de un elevado precio…” Vuelve el romance en el que muchos de pequeños aprendimos la literatura, la historia, la lengua y la sonoridad de la poesía. Y vuelven con el aire reivindicativo de ser conciencia social en tiempos tan crudos. “Los pilares de hoy en día /que nos quieren inculcar/ son maldita hipocresía/ e injusto poder brutal./ Nos fomentan la codicia/ amén del sano egoísmo/ como eterna compañía/ y lo llaman modernismo”. Paco Algora, auténtico, un amigo que vive en Vejer de la Frontera, allá arriba en el cerro, desde el que tiene perspectivas veraces, y que en sus romances de locos recoge enseñanzas, como se hizo antaño y en donde aprendimos todos.
La Editorial Almuzara comunica que la editorial polaca Wydawnictwo Pascal ha adquirido los derechos de publicación del primer libro de la saga de Laila Winter de la escritora gaditana Bárbara G. Rivero, quien con su primera obra se ha consolidado como una autora de referencia dentro de la literatura fantástica española. Hecho que nos alegra profundamente, por la amistad con Bárbara y por el reconocimiento a esta obra suya.
Bárbara G. Rivero llegó al mundo literario de la mano de la editorial Toromítico, sello del Grupo Almuzara, y lleva publicadas dos entregas- Laila Winter y las Arenas de Solarïe y Laila Winter y los Señores de los Vientos- ambas con gran éxito de ventas y crítica, como así lo atestiguan la gran cantidad de reseñas que han aparecido en numerosos medios de comunicación y blogs literarios, que ven a Laila Winter la sustituta perfecta para ocupar el hueco que ha dejado Harry Potter.
Como ya dijimos en estas páginas, Laila Winter es la protagonista de una historia de hadas ambientada en la actualidad, donde la escritora, con una prosa cuidada y elegante, recrea atmósferas tan fabulosas como las de Michael Ende, J.K. Rowling o Terry Pratchett. Un libro con una delicada profundidad que nos sumerge en ambientes sutiles y peligrosos donde las hadas ya no recogen flores y pululan con su varita por mundos idílicos esperando ser la madrina de una princesa que desea ser besada por un príncipe. En los mundos de G. Rivero si no te andas con cuidado puedes acabar con tus ojos metidos en un frasco.
Fiel a la tradición de la literatura fantástica los polacos podrán disfrutar de momento de la primera entrega, a la espera cerrar la venta de derechos del segundo libro, Laila Winter y los Señores de los Vientos, que fue editado en España el pasado mes de octubre y que está cumpliendo con las expectativas que había depositado en él. Fuew presentado en Jerez las pasadas navidades en la Librería Hojas de Bohemia. Por su parte, la autora gaditana, como ya anunció en la citada presentación, está terminando la tercera entrega, sin título aún, que posiblemente llegue al mercado hispano antes de verano, fecha que se ha adelantado a la que inicialmente se tenía prevista dada la demanda de lectores que están solicitando la continuación de esta saga fantástica.
El blog de Juan Félix Bellido 
