La Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras, de Jerez, me ofrece su tribuna el martes 18 de mayo, a las 20,30 h. para pronunciar la conferencia titulada “Mujeres andalusíes: espacio y poder. “Seres defectuosos en razón y religión”. Una oportunidad de reflexión y de análisis, y también de estudio de la historia medieval española y de sus protagonistas. En este caso, dos mujeres, que desarrollan su labor en Córdoba y en Sevilla y que, a pesar de haber brillado en su actividad intelectual, no lograron conquistar un espacio adecuado en un mundo donde la mujer ocupó un lugar secundario y oculto.
Para la mujer escritora medieval no fue fácil. Quedó marginada en su época y la memoria no ha sido justa a la hora de conservar y reconocer su obra. Aún más difícil resultó en el ámbito de la cultura que dominó en el periodo andalusí. Recuperar para la memoria la obra y la historia de estas mujeres es una labor a la que se han dedicado muchos historiadores y filólogos especializados en la Edad Media, con indudable éxito, aunque aún quede mucho por hacer. En la conferencia “Mujeres andalusíes: espacio y poder. “Seres defectuosos en razón y religión”, nos centramos precisamente en el período andalusí, y repasamos los espacios y el papel que representaron mujeres como Wallada bint al-Mustakfi o Nunna Fatima, que escribieron o desarrollaron su labor en nuestra tierra, con el propósito de acercarlas más y darlas a conocer en la actualidad. Una excusa para estudiar y descubrir, si cabe someramente, a las mujeres que la rodearon y que poblaron aquel universo.
La historia deberá hacer justicia para recuperar para los espacios canónicos, literarios y religiosos, a mujeres que aún siguen marginadas de dichos espacios, como en su época lo estuvieron de aquellos otros. Éste es el hilo conductor de la ponencia.
Pero, para ello, se hace imprescindible el esfuerzo de releer la Edad Media –“releer” en el sentido que lo entienden Iris Zavala o lo entendió Lola Luna-, releer la Historia. Y hacerlo sin pudor como viene haciéndose en los últimos cuarenta años y, haciendo posible que la mujer se sitúe en un ángulo diferente.
Y porque para recuperar las voces hay que leer de otra forma, se requiere una nueva lectura. Y esto significa, entre otras cosas, como escribe Iris Zavala, “tomar conciencia de que las palabras nos engañan, que nos hacen creer en la existencia de cosas, de objetos naturales. El producto de esta operación es la reconquista de la identidad, deformada, desfigurada, silenciada, domesticada en la memoria cultural, convertida ya en habitus gracias a la persistencia de los arquetipos enmarcados como función inmanente por las prácticas discursivas”.
En espera de proseguir una reflexión más amplia sobre este tejido casi virgen, esta conferencia –que es fruto de un acercamiento a las fuentes, sin prejuicios y como aportación al conocimiento de una obra literaria y cultural parte de nuestra historia-, en un esfuerzo divulgativo pero serio, que acoge la Real Academia de San Dionisio, y deja fijado los nombres de dos de ellas, una escritora y una mística, para superar la amnesia y así dejar abierta la “relectura” y el acercamiento al mundo medieval femenino: Wallâda bint al-Mustakfî y Nûnna Fâtima bint ibn al-Mutânna. Una razón más que suficiente para acercarnos a la historia y disfrutar de sus versos, de sus virtudes y de sus obras.
Archivo de May 2010
Biblioteca Nacional (Madrid)
El Gobierno Español ha decidido recortar el gasto público o, por lo menos, hacer como que lo hacía ante la evidencia de cierto derroche y el clamor popular que solicita que ante el apretón general del cinturón, también éste dé ejemplo. Y lo hace recortándole el chocolate al loro. En fin, nada de nada. Una tomadura de pelo. Pero lo que más me ha sorprendido es que uno de los escasos cargos suprimidos es el de Milagros del Corral, la Directora de la Biblioteca Nacional. Es significativo que se recorte de ahí, de la cultura, del patrimonio literario y documental español. La hermana pobre de este país es la cultura. Pero es lamentable que se recorte en este apartado cuando la labor de la directora era excelente y cuando lo que más falta nos hace es cultura y educación. Pues bien, ahora nos venimos a enterar que, con tanto cargo inútil, para este gobierno lo prescindible es la Dirección General de la Biblioteca Nacional. ¡Lo que faltaba!
La editorial cordobesa, Ediciones El Almendro, acaba de publicar un interesante libro titulado “Dos mil años de historia del pueblo judío”, del historiador José R. Ayuso. En él ofrece una mirada crítica, pero respetuosa del pasado judío, un recorrido ágil y rápido por los dos mil años de historia de este pueblo antiguo y memorioso, superviviente de las grandes culturas del Oriente Próximo Antiguo. Un pueblo que hoy cuenta ya con 5770 años de historia. Es historia y a la vez reflexión sobre la vida y la identidad de este pueblo y, sobre todo, de la diáspora que ha venido sufriendo desde el año 70 de nuestra Era. Una síntesis interesante que nos ayuda a comprender a este singular pueblo.
En la lectura poética que durante la Feria del Libro celebrada recientemente en Jerez realizó en la Librería Hojas de Bohemia, el actor y escritor Paco Algora, accedió, tras cierta insistencia por nuestra parte, a leer un poema suyo, concretamente un romance perteneciente a su último libro “Romance de locos, coplas de ciegos” que no me pareció sino una radiografía “en román paladino” de la sociedad actual. Se titulaba dicho romance “Confusión”. Y dice así:
Terribles tiempos oscuros / en que vivir es un reto / se nos hace ya muy duro /andar entre parapetos / en un mundo que se agita / sumido en el disparate / que a la maldad entroniza / y la sube a los altares / como modelo a seguir / renunciando a la esencia / de modo que nuestra vida / ya no tenga referencias. / Son otros tiempos nos dicen / olvidad lo de la escuela / ser honrado de por vida / es quedarse sin merienda. / El amar hoy los oficios / no se inculca en los pequeños / ni se forjar hombres libres / capaces de vivir sueños. / El aprendizaje sobra / pues todos somos doctores / para qué aprender en libros / si somos mucho mejores. / Cultura del pelotazo / triste realidad impuesta / por cretinos mandamases / que ganaron la contienda. / Sacrificio y altruismo / eso son sólo memeces / vosotros plantad nogales / que os robaremos las nueces. / Que no nos turben la calma / no oigamos la voz del vulgo / henchido de mentecatez / vulgaridad y tumulto. / Sólo en silencio hallaremos / el manantial que subyace / en lo hondo de la esencia / de nuestros carnales trajes”.
Las cuatro verdades del barquero en octosílabo, y en la copla más popular que nos legó la historia.
Leo una de las definiciones más hermosas que he escuchado sobre el amor y no me resisto a transcribirla y dejarla aquí escrita. Es de Charles de Foucould. «Cuando se ama a alguien, se está realmente en él, se está en él con el amor, se vive en él con el amor, ya no se vive en sí, uno está ‘desapegado’ de sí, está ‘fuera’ de sí”. No necesita comentario. Lleva a la reflexión en este tiempo de mercantilismo de los sentimientos y de los afectos, de egocentrismo, de utilitarismo y de egoísmo. La frase de Foucould sí que es, sin eufemismos, un “monumento” a la autenticidad del amor. Ahí queda.
El blog de Juan Félix Bellido 